Las habitaciones son muy limpias, pero si puedes, pide una con vista al exterior para disfrutar de más luz natural durante tu estancia.

Una estancia inolvidable en Luarca

La limpieza del hotel era impecable y la atención de Mariluz y Luis fue excepcional. Siempre dispuestos a ayudar y guiarnos sobre los mejores lugares de la zona.

El hotel no cuenta con ascensor, lo que puede ser complicado si te alojas en el tercer piso, especialmente después de un largo día explorando Luarca.

La habitación que tuvimos era simple pero cómoda. Todo estaba muy limpio y bien cuidado. La cama era cómoda, lo cual es un gran punto a favor. La única pega es que era un poco pequeña, pero al menos estaba bien aislada del ruido de la calle. Así que, por suerte, descansamos bien.

La limpieza fue impecable y cada rincón estaba en perfecto estado. Además, la atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a recomendarme platos típicos y ayudarme con lo que necesitaba.

Habitación algo pequeña.

Al llegar, disfruté de unas vistas magníficas desde el patio de mi habitación. La atención del personal fue excelente, me recomendaron platos típicos que resultaron ser un acierto. Probé unos chipirones que estaban muy frescos y sabrosos. La limpieza fue notable, todo estaba en orden durante mi estancia.

La habitación era un poco pequeña y pasé algo de tiempo subiendo escaleras, lo que no fue muy cómodo. La ducha tenía un cabezal de hidromasaje que no funcionaba.

Habitación cómoda, Wi-Fi gratis y TV de pantalla plana. El espacio era un poco pequeño.

Estancia perfecta!

Disfruté de una experiencia increíble durante cinco noches. Las vistas eran espectaculares y la cama, muy cómoda. Cada mañana, el personal me recomendaba platos de la región. Aunque el restaurante estaba cerrado, estoy seguro de que la comida es sobresaliente. ¡No olvides probar el menú del día!

Habitación limpia, cama súper cómoda y baño con ducha espectacular. La ubicación está de lujo, cerca de varios restaurantes. El personal muy amable, siempre con una sonrisa y dispuestos a ayudar. Recomiendo el lugar al 100%. Sin duda volveré.

La comida deliciosa, especialmente los chipirones en tinta y el cachopo de pollo. El servicio amable y atento, siempre dispuestos a recomendar platos. La limpieza impecable en el hotel, lo que hizo nuestra estancia muy agradable.

Las muchas escaleras que hay en el hotel para acceder a las habitaciones pueden ser incómodas y poco prácticas, especialmente con equipaje.

El Hotel Restaurante Oviedo está muy bien ubicado, cerca de la plaza y de muchos bares y restaurantes. La habitación era cómoda y silenciosa, y el personal fue increíblemente amable. Nos ayudaron a calentar el biberón de nuestra pequeña y siempre estaban dispuestos a ayudarnos. La limpieza fue impecable, y la cama era muy cómoda, lo que hizo que descansáramos muy bien.

Las muchas escaleras para acceder a las habitaciones pueden ser incómodas.

Ubicación perfecta y muy céntrica, habitación limpia y detalles cuidados. Comida sabrosa, ¡me encantaron los chocolates!

La habitación era tan pequeña que si me estiraba, daba en la ducha.